Ahora que lo pienso, nunca he creído en el destino, bueno ¿o tal vez si? No sé. ¿Qué es lo que determina nuestra vida?¿somos nosotros o quizá eso que llamamos destino?¿Por qué si no pasan cosas que tratamos que no pasen?
Alguien especial me escribió no hace mucho que "el destino es caprichoso", igual que un niño pequeño que tira de su madre hasta conseguir lo que quiere, que llora y patalea hasta conseguirlo. Si nunca he pensado en el destino, menos se me había ocurrido pensar en un adjetivo que lo calificase, sin embargo, los últimos días, más bien las últimas semanas me han hecho pensar en ello. Si no, ¿por qué has aparecido ahora en mi vida? o mejor ¿por qué apareces justo en el momento (como bien me dijiste) que nuestros caminos se separan, muy lejos y durante tanto tiempo. Yo no lo tenía previsto así que eso me hace pensar en que "algo" ha jugado con unas cartas que no son suyas.
No sé si debería darle las gracias por hacerte entrar en mi vida o darle la espalda por haberte alejado de ella tan pronto. Es una pena no poder hacer trampas y mirar las cartas de ese jugador que puede esconder un as en su manga.