viernes, 25 de abril de 2008

Devuélveme mi sonrisa


Quiero que me la devuelvas, necesito que me la devuelvas. No sé vivir sin ella, te juro que lo he intentado pero no puedo seguir saliendo a la calle sin ella todos y cada uno de los días de mi vida.
Cuando me miro al espejo cada mañana veo el hueco que ha dejado y que no sé con qué voy a llenar y cuando hablo con la gente me dice que si me he hecho algo en el pelo porque me ve rara, diferente. No se trata de un capricho o una tontería, la necesito de verdad. Porque me ayudaba a expresar lo que siento, porque verla dibujada en una foto me trae buenos recuerdos, porque aunque a veces le costase salir tu siempre eras capaz de convencerla para que lo hiciese.
¿Acaso la has secuestrado y estás pensando en poner una cifra a su rescate? Te daré lo que quieras, haré lo que me pidas pero por favor, devuélveme mi sonrisa.

2 comentarios:

Soledad Sánchez Mulas dijo...

Si te roban la risa cuando al marcharse se llevan un pedacito tuyo,
o cuando las imágenes son duras y te hielan también la sangre de las venas,
o cuando el "no" ha salido de esa boca de la que tanto esperas,
o cuando el otro sufre y tu no tienes remedio para darle,
o cuando el día es largo y la noche absoluta y cerrada,
o cuando los trabajos te pesan a la espalda...
mírate en el espejo, verás, eres de carne,
tienes el alma dentro,
tienes los ojos para buscar lo bueno,
el oído para escuchar los "síes" que te esperan,
las manos para abrazar a los que ahora están,
tienes la vida entera, verás,
mírate en el espejo,
desbrúmate los ojos,
quita el vaho,
es nuevo y es hermoso:
tu reflejo.

Un beso.

Soledad.

Estela dijo...

Hola! he estado curioseando por tu blog, espero que no te importe, ya que nadie me invitó a pasar. Pero decirte que te has ganado a una lectora fiel. Y que este post me ha emocionado, a mi también me han robado la sonrisa recientemente, no creo que te anime, ni que ayude a que la recuperes, sólo soy una desconocida, pero creo que las únicas que podemos hacer algo para que la sonrisa vuelva somos nosotras mismas. Es un largo camino, pero seguro que algún día te mirarás en el espejo y ahí estará!
Ánimo